Más de 6.500 espectadores (todo el aforo) se apostaron en las graderías del escenario, algo que no sucedía desde hace aproximadamente 13 años.
El hecho llenó de satisfacción a los salonistas, quienes se animaron a afirmar que son el segundo deporte en el país, por detrás del fútbol.
Las tribunas del coliseo no sólo se llenaron en esa oportunidad, ya que un día antes, en la jornada semifinal, 5.800 aficionados pagaron su entrada para ver los encuentros.
“En el inicio del torneo no hubo mucho apoyo, cerca de 4.000 personas siguieron las tres primeras jornadas del campeonato”, afirmó el presidente de la Federación Boliviana de Futsal, Juan Gironás.
Recordó que en 2012, en la final de la División Mayor del Fútbol de Salón (Futsal) entre Wolf Sport de La Paz y VHSR de Oruro, el escenario también se llenó, pero no como en esta última oportunidad. El dirigente recordó que en 2000 se batió un récord. Se vendieron 9.000 entradas para la final del mundial y se tuvo que devolver mil boletos porque el cálculo que se había hecho del aforo del escenario estaba errado.
“Habilitamos espacios en la cancha y devolvimos entradas. Pero éste es un deporte que atrae a mucha gente”, remarcó el dirigente.
El DT de baloncesto Orlando Roldán confesó “qué envidia” por la cantidad de público que llevó el futsal y afirmó que es el segundo deporte en La Paz.
Recordó que en las décadas de los años 70 y 80 el baloncesto llenaba el coliseo y “sólo con partidos del torneo local, cuando jugaban Ingavi, Litoral, Mariscal Santa Cruz”.
En 2012 La Paz fue sede del nacional juvenil de baloncesto, “cada jornada tuvo un promedio de 500 espectadores en las tribunas”.
El periodista Gonzalo Cobo recordó que en 1998 el club Ingavi “era capaz de llenar el escenario”, cuando Fernando Torrico intentó profesionalizar el deporte y se jugaba la Liga Sudamericana. “Llegaban equipos como Boca Juniors y Vasco Da Gama. Ingavi tenía refuerzos estadounidenses, una verdadera atracción para la gente”, señaló.
El voleibol femenino también tuvo su época dorada en la década de los años 90. El titular de la Asociación Municipal de La Paz, Freddy Cruz, contó que en los nacionales llegaban cerca de 6.000 espectadores al escenario de la calle México.
Entrenadores y dirigentes del voleibol y básquet coincidieron en afirmar que el futsal superó a sus disciplinas y que una de las principales causas para que el público les reste apoyo es el bajo nivel.
“Tenemos que buscar mecanismos para mejorar el deporte y ganar adeptos. Debemos iniciar un trabajo serio”, afirmó el entrenador de básquet Orlando Roldán.
Una de las ventajas que tiene el salonismo, en relación con las otras especialidades, es que se lo practica en todos los colegios y zonas, ya que cada uno de ellos tiene un polifuncional.
“En un corto tiempo el futsal podrá superar al fútbol, que es más caro, especialmente en Bolivia”, agregó Roldán.
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